Coronda amaneció una vez más con movimiento policial intenso y en este caso con un dato aleatorio porque se trata de la investigación de un homicidio.
Merced a directivas establecidas por el Fiscal de Coronda, Dr. Marcelo Nessier, la Agencia de Investigación Criminal allanó dos domicilios, uno en Barrio Alfonsín -una barriada de buena gente que viene maltrecho con continuas novedades de este tipo- y otro en calle Santo Tomé.
Como consecuencia de las actuaciones policiales, fueron detenidos una mujer y un hombre, quienes fueron vinculados con el homicidio de Pedro Holman nada más y nada menos, ocurrido en febrero pasado. Cabe aclarar que el sujeto, de 21 años -la mujer tiene 42- fue encontrado en el domicilio de su novia en Barrio Policial pero también vive en Barrio Alfonsín y es vecino de la otra implicada.
A partir de estas detenciones también se secuestraron elementos de interés para la causa. Con estos arrestos, en las próximas horas se harían audiencias imputativas y podrían establecerse formalmente las acusaciones por homicidio calificado contra ambos, supuestamente en calidad de coautores, según los primeros datos que surgieron apenas terminaron los procedimientos, lo que marca otra primicia de Periódico Corondino Web.
Incluso en uno de esos domicilios también se inició un operativo de drogas por haber encontrado… una plantación y un invernadero de lo que sería marihuana.
Los hechos
El 8 de febrero de 2019 un vecino apareció muerto y con su cuerpo totalmente carbonizado en una vivienda ubicada en el límite prácticamente entre Coronda y Larrechea, en zona rural, más próximo al ejido urbano de la vecina localidad que a la planta urbana de la cabecera departamental pero en jurisdicción de nuestra ciudad.
El incendio fue intencional y tuvo dos focos de inicio: uno en la habitación y otro en la cocina de la casa de la víctima que fue identificada como Pedro Holman, de 72 años de edad.
La carátula del hecho, a prima facie, fue “presunto homicidio” teniendo en cuenta que el incendio pudo ser la manera en la que habrían intentado cubrir las huellas que el cuerpo pudiera haber dejado. De hecho, lamentablemente sólo el cráneo y una parte del tórax quedaron reconocibles y lo demás fue sumido a cenizas.
La víctima yacía en su cama y el incendio fue de importantes proporciones.
