Tres oficiales corondinos pertenecientes a la Policía de Seguridad Rural «Los Pumas» se toparon justamente con el animal que le da nombre a la agrupación.
Es que este sábado en Puerto Gaboto, un vecino de la familia Quiroz notó que debajo de su parrilla había no un gato… sino un felino un poco más grande y contundente: un puma. En vivo y en directo.
Por suerte el temor lógico al ver ese extraordinario y autóctono animal no lo cegó, y pudo llamar a la Policía.
Eso generó que casualmente los «Pumas» acudieran al domicilio urbano de la localidad más al sur del departamento, desde la sede de Irigoyen, y armaran una logística para reducir al animal -que parecía exhausto- sin lastimarlo pero también para resguardarlo y luego entregarlo a las autoridades ambientales, de acuerdo a lo que estipula la Ley 22421.
Los uniformados que actuaron fueron todos corondinos: los oficiales David Zeballos, Eduardo López y Darío Cabral. Luego del llamado acudieron al lugar, se toparon con el puma -macho-, lograron enlazarlo, luego llamaron al veterinario que lo sedó, tras eso se lo puso en una jaula, se lo subió a una camioneta y desde allí era trasladado a la Granja La Esmeralda, para prepararlo para devolverlo a su hábitat, según habría precisado el Dr. Daniel Hunziker, Subdirector de Ecología de la Provincia.
Tengamos en cuenta que hoy la granja no es lo que supo ser pero su estadía sería mínima para acomodarlo para que pueda volver a su propio hábitat.
Se calcula que salió de su medio natural por la bajante del río, teniendo en cuenta que hay reservas no muy lejos de Gaboto. Es cada vez más usual en los últimos tiempos ver aves y mamíferos fuera de sus sitios habituales y es más, ingresar al mundo urbanizado de los humanos…
