En la mañana de este jueves se informaron 52 positivos más de coronavirus en Coronda, en 24 horas. Esto implica que con los números de esta mañana temprano ya había 204 casos activos vigentes con 426 aislados -acá no cierran los números-. Hay una persona internada en sala común y ya llegamos entonces a 2154 casos desde el 27 de junio de 2020, hace más de un año y medio que la ciudad reniega con esta enfermedad.
Esta mañana en Plaza Urquiza, por otra parte, se realizó el Plan Detectar que arrojó 160 contagios confirmados nuevos y dejó 11 personas más -empleados del estado sobre todo de distintos rubros como salud y seguridad- para practicar un PCR. Impresionante, sobre 253 hisopados el porcentaje no bajó del 65%, si bien todavía no se oficializó el número «fino» y final, pero nuestro medio pudo averiguar este primer dato definitivo.
Entonces, si agregamos a los que estaban informados, los del Detectar, Coronda hoy estaríamos superando holgadamente los 350 casos activos cuando el jueves pasado había 1 solo. En una mañana con el testeo general casi se duplicó la cantidad de positivos.
Como una de las primeras medidas -acordadas- la Fiesta de Reyes y el pata pata previsto para este sábado, fueron suspendidos de común acuerdo.
El panorama comienza a complicarse más de la cuenta. Porque pese a que todos piensan que estas cepas de coronavirus son un poco más fuerte que una gripe, nadie está tomando en cuenta las secuelas que puede dejar haberse enfermado de Covid19. Pero más allá de eso, dentro de una comunidad si se contagian ciudadanos comunes o algunos de ellos, más estando de vacaciones, los sistemas no se resienten.
Pero empezarán -y de hecho está ocurriendo- que empleados públicos del Servicio Penitenciario, policía, EPE, oficinas públicas, el municipio zafa porque hay receso general, se están contagiando. Los médicos, enfermeras no son inmunes por su profesión pero sinceramente merecían serlo. Si todos estos sectores van disminuyendo su cantidad de trabajadores habrá complicaciones e incluso cierres.
Los comerciantes tienen como espada de Damocles que si no informan que están contagiados, siguen trabajando y si los descubren, el remedio será peor que la enfermedad.
Insistimos. La gravedad de los síntomas y la cantidad de internados y fallecidos es mínima, tanto que desde este rebrote sólo hay una persona con falta de oxígeno en una sala común y nada más. Pero también tengamos en cuenta que desde hoy comenzarían los efectos de lo que pasó con las reuniones de fin de año -si bien no es matemático-, y ni hablar de la gente que está vacacionando y volverá muchos de los cuales quizás no se aíslen. Mar del Plata y Córdoba explotaron en casos…
Está claro que no hay encierro ni reducciones de actividades comerciales posibles, arrancando por el hecho de que quien nos mandaba «a guardar» ya no tiene autoridad moral para aconsejar a nadie, como es el presidente Alberto Fernández que se mantuvo en silencio total en este tiempo, pero desde lo cuantitativo no es descabellado pensar que en los próximos días tendremos unos 500 casos activos, cosa nunca vista con esta pandemia.
Está claro que la política casi no se ha metido en esto, por el desmadre que generó en lo económico, porque ven que las cepas no son necesariamente mortales, y porque el costo que pagaron en las urnas todavía hace cosquillas de las feas, pero algo habrá que hacer, salvo que el plan -en otros lugares lo están haciendo- sea que todos se contagien para que el virus se desgaste.
Ahora bien, y volvemos al principio. Quizás los síntomas sean leves, pero… ¿Las consecuencias de contagiarse de coronavirus, serán tan livianas? En Coronda hay muchos ejemplos de que ante síntomas leves las secuelas fueron importantes.