Días atrás recordemos que surgió un nuevo intento por reflotar el proyecto Bajos Bragado, que implicaría que desde la cuenca Malaquías- Los Troncos se abrirían canales para que sacara agua de lluvia de campos sobre todo del departamento Las Colonias, en el Arroyo Bragado y terminaran en el Río Coronda.
Hubo dos oposiciones concretas: una de la localidad de Matilde porque dar permiso a esta obra implicaría inundar muchos campos y otra de Desvío Arijón porque la afluencia de más agua desde otros canales elevaría el cauce del arroyo y pondría en riesgo a la población se desbordase en caso de una nueva inundación como la de 2007.
A esto podría tener que sumarse el resultado de un informe que dio a conocer Aire de Santa Fe a través de Jorgelina Hiba y que se basa en estudios de la Universidad Nacional del Litoral para la Asociación Herpetológica Argentina que indica que ”la contaminación por pesticidas, mezclas de materia orgánica y desechos industriales alteró completamente el ciclo natural del arroyo Los Troncos y del canal San Carlos, generando una letalidad alarmante de tortugas acuáticas, así como de renacuajos de anfibios”. Es decir, uno de los arroyos a través del cual se quiere mandar agua al Bragado.
El nombre es “Alta toxicidad de aguas residuales agroindustriales sobre la fauna acuática de un arroyo sudamericano: mortalidad de tortugas acuáticas y renacuajos de anfibios como bioindicadores de salud ambiental” y fue realizado por los investigadores Ana Cuzziol, Leonardo Leiva, Carlina L. Colussi, Karen Russell-Blanco, Noelia Di Conza, Paola Peltzer, Andrés Attademo, María R. Repetti y Rafael Lajmanovich.
“El resultado de nuestro estudio muestra que un pequeño arroyo en la región pampeana con alta producción agroindustrial produce una letalidad alarmante de tortugas acuáticas como se observa en el campo. De manera similar, estos efluentes producen la letalidad de los renacuajos anfibios en muestras puras y diluidas hasta en un 25% en bioensayos de laboratorio. Las diluciones subletales del Canal también mostraron una alta ecotoxicidad en renacuajos de anfibios, produciendo deterioro en los mecanismos antioxidantes, genotoxicidad y neurotoxicidad”, concluye el trabajo, que agrega que es importante señalar que los abundantes caparazones y esqueletos de las tortugas adultas y la ausencia de juveniles muertos “pueden deberse a una exposición crónica durante un largo período. Es urgente tratar las aguas residuales agroindustriales que desembocan en canales y arroyos artificiales, donde se registraron los datos”, sostiene el trabajo.
Los investigadores explicaron que el objetivo del estudio fue caracterizar un sistema acuático de la provincia de Santa Fe que recibe de forma sistemática aguas residuales provenientes de actividades agroindustriales (principalmente lácteas), mediante evaluaciones en el lugar que incluyeron mortalidad de fauna, mediciones fisicoquímicas, microbiológicas y de residuos de plaguicidas y bioensayos de ecotoxicidad. Para eso se obtuvieron muestras de agua y sedimentos del arroyo Los Troncos, previo a la confluencia con el canal de drenaje San Carlos.
El documento subraya que la principal producción agroindustrial de la zona central de la provincia de Santa Fe “se caracteriza por actividades industriales agroalimentarias”, lo que conlleva “un gran aumento de la contaminación ambiental por pesticidas agrícolas”. “En nuestro estudio, se demostraron los efectos letales y subletales de las aguas residuales agroindustriales sobre la fauna acuática con base en estudios in situ y de laboratorio, destacando su alto riesgo para la salud ambiental”, dijeron los científicos.
Según la investigación, se detectaron nueve pesticidas en ambos cursos de agua. “La demanda química y bioquímica de oxígeno, el amoníaco y el recuento de coliformes registrados en el Canal excedieron con creces los límites para la protección de la vida acuática”, dice el trabajo, que agrega que se corroboró un “alto deterioro de la calidad ambiental y la alta ecotoxicidad para la fauna acuática de los ecosistemas acuáticos afectados por aguas residuales agroindustriales”.
Por otra parte, los investigadores hacen un llamamiento para que se implementen políticas ambientales en la región pampeana “de acuerdo con las medidas y principios de precaución establecidos en las leyes ambientales”, como la Ley General del Medio Ambiente 25.675. Además, recordaron que aguas abajo desemboca en el río Coronda, donde se encuentra “un importante suministro de agua potable” que es el Desvío Arijón: “el deterioro de este sistema hídrico no sólo está provocando ecocidio en humedales, sino que también podría estar afectando silenciosamente la salud humana”.
Con datos y foto de Aire de Santa Fe.