El juez penal Gustavo Urdiales dictó la prisión preventiva para un hombre acusado de abusar de su hijastra en la ciudad de Coronda. La víctima, que tiene 24 años y padece un retraso mental moderado, ya había atravesado una situación traumática similar, cuando sufrió un ataque sexual hace tres años, a manos de un vecino, y por lo cual también se inició una causa penal.
Si bien la denuncia que tiene como imputado a F.R.A. (el padrastro) se produjo el 19 de mayo, su detención se concretó recién el lunes pasado, cuando la víctima ratificó los cargos en una entrevista en cámara Gesell, que fue agregada a la causa como anticipo jurisdiccional de prueba.
En ese sentido, el fiscal de Coronda, Marcelo Nessier, explicó el derrotero que tuvo que atravesar la joven, que “fue entrevistada cuatro veces” desde que se decidió a contar el trauma. “Primero lo hizo ante la médica del Samco” de Coronda que la atendió por una consulta a la que asistió acompañada por su hermana mayor por un cuadro de galactorrea (secreción espontánea de leche a través de los pezones fuera del período de lactancia y sin haber habido un embarazo). Apenas la médica comenzó a indagar, la paciente rompió en llanto y puso por primera vez en palabras su padecimiento diciendo que su padrastro la había violado.
“Ese relato lo mantuvo en cuatro instancias”, reiteró el fiscal, en referencia a la médica del Samco; luego la psicóloga de la misma institución (que la entrevistó para saber si estaba en condiciones de declarar en cámara gesell). La misma historia la repitió ante la psicóloga de la AIC del área forense de la policía corondina, donde “por tercera vez lo menciona al padrastro” y finalmente ratifica todos sus dichos en entrevista en cámara Gesell el lunes pasado.
Si bien la defensa, a cargo el Dr. Juan Bautista Fossa, sostiene que como ya había sufrido un abuso la chica confundió los episodios, en el informe psicológico se establece que claramente puede distinguir un abuso del otro. Y aunque no esté clara la fecha en que se concretaron los hechos, existen constataciones de médico forense sobre los hematomas registrados en ambos pechos de la joven.
Por el caso el fiscal Nessier atribuyó a F.A. la autoría de los delitos de “abuso sexual con acceso carnal reiterado, agravado por el carácter de guardador, y por la situación de convivencia preexistente (reiterados), y amenazas coactivas en concurso real, en el marco de la ley de violencia de género” y solicitó la medida privativa de la libertad.
Previo a que el juez Urdiales impusiera la cautelar, el imputado pidió la palabra y se declaró inocente. En tanto su esposa, que también fue llevada ante el juez, lo defendió de las graves acusaciones vertidas por una de sus hijas. Dijo que F.A. es “una persona buena” que se hizo cargo de la crianza de sus dos hijas cuando éstas tenían un año la mayor y ocho meses la menor; y aseguró que no se trata de una persona violenta.
Pero el matrimonio, que tiene en común un varón de 18 años, no sería todo lo bueno que intentaron mostrar ante el juez el viernes pasado, ya que tras escuchar a ambos, la fiscalía puso de resalto dos denuncias de mediados de 2019 por violencia doméstica realizadas por la esposa y de las que finalmente desistió por pedido de su hijo.
“Había que sacarlo del contexto familiar, porque no sabemos con qué libertad estaba la mujer declarando a favor de él”, expresó el fiscal Nessier al recordar que “hay dos legajos del año pasado por amenazas y lesiones leves dolosas”.
(Fuente: El Litoral – Portal de Medios).