Entre la noche de este martes y la madrugada de este miércoles Desvío Arijón se encontró con una doble sorpresa desagradable: el robo de dos transformadores de energía eléctrica pertenecientes a la Empresa Provincial de la Energía.
Uno estaba ubicado casi en la intersección de la Ruta Nacional 11 y de la Ruta Provincial 36s y su sustracción afectó por unas horas el funcionamiento del acueducto -que habría optado mientras tanto por el uso de un equipo electrógeno- mientras que el Cementerio quedó sin energía pero de día casi no se utiliza.
El otro estaba puesto en calle 9 de Julio entre Barrio Papelera y Caima, aproximadamente en el Km. 438 de la Ruta 11 en un loteo nuevo que no está habitado aún.
La policía de la Comisaría 15 está realizando las pesquisas correspondientes y del mismo modo se pide colaboración a los vecinos o transeúntes que hayan podido observar algo.