Este martes en horas de la noche dos hombres fueron detenidos por estar vendiendo una bomba centrífuga que había sido recientemente robada.
La oportuna llamada telefónica de un vecino alertando a la policía sobre la maniobra hizo que se dirigieran a Lisandro la Torre y General López a personal del Grupo de Operaciones Tácticas y de la Brigada Motorizada.
Casi inmediatamente, un vecino llamó y denunció el robo de una bomba Grimoy de color rojo y de media pulgada, que coincidía con la que fue secuestrada por las fuerzas de seguridad.
A partir de allí fueron detenidos un hombre de 32 años, y otro de 46, ambos domiciliados en zona sur.