Da que sospechar que a los pocos días de haberse producido un robo en la Escuela Granaderos de San Lorenzo, no muy lejos de allí, en el Centro de Salud de Barrio Los Paraísos se registró otro hecho ilícito, que además, indigna.
Hace mucho tiempo que los vecinos del barrio no tienen una solución a la inseguridad: casas quinta, viviendas, instituciones, no perdonan nada y los robos continúan. La policía está limitada en su accionar, al parecer, ya que hay poco personal y móviles pese a la cantidad de pedidos hechos por los dirigentes de la vecinal a la Municipalidad para que interceda ante las fuerzas de seguridad.
En esta ocasión, según contó el titular del Centro, Mauro Bondino: «Cuando fui a abrir el Centro de Salud, habían intentando sacar el bombeador, habían hecho palanca en una abertura y sacaron la ventana» y al entrar comprobé que «se llevaron la computadora, otro monitor viejo, la pava eléctrica, algo de medicación pediátrica, y dejaron la heladera abierta» tras lo cual como consecuencia «se perdieron todas las vacunas».
El funcionario hizo la denuncia correspondiente pero, una vez más, la lejanía del lugar le ha dado toda la impunidad para actuar a delincuentes que además de eso, atacan escuelas y centros sanitarios donde quizás conocidos vayan a clases o se vacunen.